Tratamiento

En un mundo como el nuestro, donde la soledad, la tristeza, ansiedad, miedo, estrés, las enfermedades son grandes males que le aquejan; las personas cada vez más, hacen uso de la gran diversidad de terapias que existen para poder solucionar todo esto. La mayoría de la gente está tan centrada a lo largo del día en producir los resultados exitosos exigidos por los estándares sociales, económicos y culturales, que sufren la desconexión de su propio eje y anclaje consigo mismo. Se actúa constantemente bajo la mirada inquisidora del otro, lo que tiene como resultado la enajenación de nuestro propio prisma de creación de la realidad, conocimiento y experimentación. Nuestro sistema de creencias deja de ser propio para estar dirigido por los patrones sociales, económicos y culturales que te dicta la realidad creada de tu entorno, la cual se determina como lo que he llamado: “el otro”.

Ante la necesidad de volver a retomar el control de nuestras vidas a todos los niveles, ya sea emocional, afectivo, psíquico y físico, en los últimos años han aparecido un amplio abanico que ofrece una gran oferta terapéutica. Cada individuo de acuerdo con sus diferentes preferencias, elige libremente la terapia que mejor se pueda adaptar a ellas. La efectividad de la terapia elegida dependerá de diferentes factores sobre los que se determine la misma. Hay terapias de todo tipo: aquellas que exclusivamente se centran en la cuestión física, otras en el aspecto mental y por supuesto en las emociones. Algunas tratan a la persona de forma individual, en parejas y otras de forma grupal. Considero muy importante ser completamente honesta y clara al exponer este tema. Las terapias regladas y por tanto apoyadas en un método científico son aquellas que son impartidas en exclusiva por los psicólogos titulados, psiquiatras o cualquier otro profesional de la salud titulado en los estándares reglamentarios reconocidos por el Ministerio de Salud Pública del país en cuestión donde cursa los estudios.Soy completamente categórica al afirmar que no soy ni psicóloga ni psiquiatra. No poseo ninguno de los dos títulos regulados por lo que no tengo la capacitación que me acredite para realizar labores propias de sendas profesiones. Mi campo de tratamiento es exclusivamente energético y se desarrolla desde el conocimiento del alma. Mi área de conocimiento es tan amplia energéticamente como lo requiera la solución a la que se pretende llegar.

Paralelamente a estas terapias institucionales, científicas y reguladas por los organismos gubernamentalesdecadapaís, tambiénpodemosencontrarunaampliagamadeterapiasque se engloban dentro de lo que me gusta llamar como ” métodos de curación alternativa”. La base de ellas es absolutamente energética, ya que se trabaja desde una cuestión sutil desde el alma. No pueden ser agrupadas dentro de aquellas institucionales ya que no tienen un método científico. El alma no puede ser medida científicamente, aunque se hizo el intento a través de un experimento el cual determina que el alma pesa 21 gramos. Obviamente esto no está oficialmente aprobado por toda la comunidad científica.

Como creadora de la “Terapia emocional del alma” navego a través de la historia experimentada por la propia alma en su tránsito por sus múltiples vidas. Me desplazo a través de las realidades multidimensionales buscando los patrones energéticos que han causado los bloqueos que se somatizan en los diferentes cuerpos más densos (emocional, mental y físico) causando las enfermedades. La finalidad última es desbloquear los niveles más sutiles de conciencia energética para que vayan permeando los cuerpos más densos y estos disuelvan en una medida completamente individual, los estadios de las enfermedades.

Es más que evidente que el término “cirugía” está relacionado desde la óptica occidental, mayoritariamente con la medicina normativa y convencional. Declaro abiertamente que en esta vida no he cursado la licenciatura en medicina ni por consiguiente soy cirujano. Partiendo de esta verdad tridimensional, os voy a contar otra, que para algunos será interesante y al menos del todo curiosa.

Ya desde la antigüedad, tanto en Egipto, Grecia y Roma, se practicaba la cirugía como una forma de incisión física en el cuerpo material de las personas con la finalidad de reparar una parte del mismo que presenta enfermedad.

A partir de ahora realizo mi mayor esfuerzo para poder desmenuzar en palabras la explicación de esta técnica utilizada partiendo desde la vibración de quinta dimensión.

En el universo todo está organizado. Todos los seres tenemos una misión que cumplir y para ello estamos preparados cuando vivimos en coherencia con nuestra alma y conciencia. El reto en esta vida es conocerse a sí mismo para así, conocer el potencial y desarrollarlo para cumplir nuestra misión divina en la tierra.

Después de un largo proceso y un largo caminar por los senderos más variopintos de esta, mi vida en la materia, he llegado a conocerme y sé quién soy, por ello la responsabilidad no solo para conmigo sino para con mi misión es completa. He sido bendecida con varios dones, regalos que a su vez han de ser ofrecidos y compartidos con todos aquellos que deseen disfrutarlos en la responsabilidad y compromiso que requieren. En este caso, estoy hablando del don de ser “ Maestra Cirujana en Cirugía Estelar Multidimensional ». Os daré algunos apuntes.

Muchas veces me habéis preguntado si realizo yo sola la operación y mi respuesta es: no. Tengo la colaboración de muchos seres especializados en esta materia que trabajan como asistentes a mi lado. Cada uno tenemos una función muy determinada. La estructura de los miembros que participan en la operación, es muy semejante al funcionamiento de una sala de operaciones que todo el mundo conoce, es decir, va desde las enfermeras especializadas, médicos asistentes de cirujano al cirujano en jefe quien dirige, actúa y realiza la intervención quirúrgica.

Otra cosa que suscita mucha curiosidad y me suelen preguntar es qué tipo de material se utiliza en las operaciones. Se trata de un material energético, elaborado con sustancias vibratorias de quinta dimensión por lo que solo puede ser manipulado desde esa frecuencia vibracional. En definitiva, se trata del uso magistral de la luz en las gamas y longitudes de onda adecuadas para resolver la dolencia desde el origen al estado frecuencial denso corporal en la materia de tercera dimensión. Evidentemente, las frecuencias de luz son proyectadas a través de una tecnología muy avanzada a lo que hoy conocemos en la Tierra de tercera dimensión.

La protección energética para todos los que intervenimos en la operación es absoluta, ya que sin ella no sería posible realizarla. Esta parte la podemos entender desde una visión muy simple: en el quirófano de la medicina convencional todos los que participan en la operación han de protegerse y proteger al paciente de los posibles virus y bacterias que existan alrededor y para ello utilizan prendas asépticas, además de realizar un profundo lavado y desinfección de manos entre otras cosas más.